carnucismo fascista

Comentario a la bronca a Pique en la universidad
1. Sobre el insulto fascista
Vivimos una época en la que las gentes se llaman fascistas unos a otros. Fascista es un insulto repetido. Un lugar común del insulto. El otro día, en la universidad, unos jóvenes han empleado procedimientos fascistas: han intentado que un señor (el ex-ministro Pique) no pudiera hablar. Lo han hecho con gritos y una suerte de animación teatral bastante tosca. No dejar expresarse a alguien, por más que este alguien haya hecho cosas que no apoyo es pura y llanamente un procedimiento que esta presente en el modus operandi del fascismo. Curiosamente los que intentaban impedir el acto lo hacían al grito de: “vosotros fascistas sois los terroristas”. Es como montar campos de concentración para encerrar fascistas. Lo que hacemos da la razón al oponente. Si asumimos que se debe internar a alguien en un campo de concentración da igual a quien le toque. Si legitimamos la multitud de gritos que acallan una voz a base de proclamas, es que admitimos que hay opiniones que es mejor que no sean oídas.
2. Sobre la posibilidad de ser oído
No obstante los chicos consiguieron que se oyera su mensaje. En este mundo sólo estas presente si sales en la televisión.
Si hubieran argumentado brillantemente, si hubieran escrito diez maravillosos artículos sobre el asunto, nadie les hubiera hecho caso. Existir en esta época esta así de caro. Hacerse notar en lugar de pensar.